Cardinal Acupuntura

Reservar cita

PRANA 5ºANIVERSARIO // INTRODUCION AL PRINCIPIO DE LA VIDA

Alejandro / /
Sin categoría

El pasado domingo día 19 conmemoramos el 5º aniversario del proyecto PRANA YOGA STUDIO y para ello todas las personas involucradas quisimos ofrecer parte de nuestros saberes y pasiones con el fin de reunir a todo el mundo que forma parte de PRANA. La impresión que todas nos llevamos fue que podía sentirse un alto nivel de energía que hizo que nos conectáramos con la sensación de bienestar que nos mueve a diario para seguir trabajando en esta iniciativa. No importó si estábamos enfermos, con muy pocas horas de sueño, cansadas o sencillamente, muy nerviosas por el acontecimiento. La energía que se movía allí dentro te envolvía desde el exterior hasta el corazón y lo único que podías expresar era una gran sonrisa.

Con este artículo me propongo recoger algunas ideas de la charla de apertura que hablaba, justamente, de lo que fue el leitmotiv de toda la jornada, el Prana.

Cada vez que he tenido la oportunidad de hablar con Ana y Miguel ( las piezas clave de este proyecto ), me comunicarón que su idea al crear este proyecto fue precisamente esa, dar vida un espacio cuyas características, no sólo arquitectónicas, sino también filosóficas y humanas, nos ayudara a recuperar el orden que caracteriza a todo aquello que está vivo. Con un fin; armonizar nuestro interior.

Mi intención con esta charla fue que las personas pudieran ver claramente que el Prana se puede comprender y/o definir en base a sus orígenes, sus centros de acción, a nivel simbólico, fisiológico y un largo, etc. Pero con el tiempo que llevo formando parte de este proyecto me he dado cuenta que todo en PRANA YOGA cumple una función que es fiel a este concepto clásico. Llevar a todo lo que vive a la máxima expresión de su buena salud.

Inicio la charla preguntando a las asistentes: “¿quien se considera una persona espiritual?”- Prácticamente todas levantan la mano. Entonces acto seguido pregunto: “¿Quienes se consideran personas creyentes?”- entonces las manos alzadas se reducen, aproximadamente a la mitad y entonces, por último pregunto: “¿quienes de vosotras sois practicantes?”- a partir de lo cual se produjo una casi total ausencia de manos en alto”?

Desde mi punto de vista esta sencilla encuesta me da a entender que hay una desconexión, incongruencia o sencillamente un malentendido en las personas que asistimos a este encuentro. Me resulta muy difícil entender cómo una persona puede ser espiritual y no ser creyente. Y más todavía como alguien puede ser espiritual y no ser practicante. Aclaremos una cuestión de manera sencilla, una persona espiritual es, por definición, alguien que cree en el espíritu. Llegado este punto repito la pregunta, ¿ Cómo alguien puede constituirse como un ser espiritual si no es a través de la fé ( creyente ) o a través de la práctica de una disciplina trascendental ( practicante ). Aquí tenemos manifiesto el problema de nuestra sociedad contemporánea. Nuestra educación más o menos fundamentada en la religión católica y el capitalismo ha generado una ruptura de la principal función del Prana. Que no es otra que unir lo mundano con lo divino. Es por este motivo que la gente no puede acceder a una realidad espiritual estable y sólida, porque rechazan la fe y la práctica de disciplinas trascendentales. 

Empecemos por comprender dos cuestiones. La primera cuestión la extraeremos a partir de observar el símbolo de este elemento etérico. En ello podemos ver un triángulo equilátero cruzado a la altura de su tercio superior por una línea.

La base de ese triángulo constituye o representa una parte amplia, tangible. Sin embargo, la punta o intersección superior hace que el triángulo desaparezca. Esta es una imagen perfecta de lo que nombramos al principio. La base del triángulo es el cuerpo material, es decir, todo lo mundano. Mientras que el vértice superior tiende a la desaparición, siendo esto representación de lo sutil, imperceptible, el cielo o lo divino. Por último esa línea que en apariencia establece una división, es en realidad una metáfora de aquello en movimiento que asciende y trasciende.  Que comunica lo superior y lo inferior.

El prana como mensajero carece de personalidad o carácter, como le nombra Paracelso, es el obrero escondido que actúa cuando la conciencia duerme. Entonces, su forma natural es; por encima de todo y de todos, neutral. Ser justo y equilibrado, significa que  actúa siempre en beneficio de todos los seres. Y no necesariamente de forma que uno pueda fácilmente agradecer.

El prana constituye la evolución natural de todos los reinos y se manifiesta de forma más evidente en los que son más básicos, como los minerales. En los cuales podemos ver muy claramente un orden regular y estable.

Entonces PRANA, el estudio de yoga donde venimos a practicar, se constituye desde sus principios como una propuesta a través de la cual sus usuarios pueden conectar lo divino y lo mundano siendo guiados por los profesionales que constituyen el proyecto.

Es de vital importancia que comprendamos que la espiritualidad es un camino o yoga y el objetivo fundamental de ese recorrido es la trascendencia del espíritu.

Para la segunda cuestión revisaremos la idea de que “el conocimiento nos hará libres”. Y para ello tenemos que entender la diferencia entre saber y conocer. 

El conocimiento o información, el estudio, etc es tan sólo una herramienta pero que requiere de una aplicación correcta. Dicha aplicación es la experiencia. Porque sin ella una se convierte en una montaña de información que lo único que aporta es una colección de datos parecidos a los de una enciclopedia ( son libros muy bonitos pero agotadores). Esto se narra muy claramente a partir de la imagen de Mercurio y su relación con el Sol. 

Los antiguos crearon el mito de Mercurio o Hermes en base a su observación del cielo, en donde el movimiento de la Tierra crea la apariencia de que el planeta Mercurio y el Sol avanzan a la misma velocidad. Sin embargo, la constancia del “movimiento del astro rey” y la del planeta Mercurio no es la misma. Siendo la de este segundo mucho más variable en su velocidad de avance. Esto es lo que provoca que Mercurio retrograde o que, aparentemente, se mueva hacia atrás. Si proyectamos esta idea en nuestro imaginario podremos ver como Mercurio va, de un lado al otro del Sol, como si fuera un niño inquieto que va adelante y atrás de su padre en un paseo por la naturaleza; mientras le pregunta, qué y porqué y para qué, etc.

Esta imagen es perfecta para entender lo anteriormente planteado, porque esas preguntas que interpelan al padre emergen de la curiosidad del niño y sin embargo, emergen de una energía profundamente mercurial por lo que éste, el niño, rara vez asumirá esa cantidad de información. Esas preguntas tienen quizá más valor para el Sol, que para Mercurio. Esa poesía o metáfora significa que nuestro intelecto no crece a partir de la acción que le es propia. Es nuestra identidad la que se constituye a partir de la actividad intelectual y ésta a su vez, hace crecer el intelecto.

Con esta imagen volvemos a insistir en que la función del Prana es la de comunicar, unir, o hacer que la identidad esencial de los seres evolucione.

Hay algo importante que tenemos que saber y que ayudará a constituir nuestra identidad como cultura occidental. Las imposiciones más o menos violentas por parte de un modelo opresor, han provocado que las personas hayamos rechazado las herramientas de liberación que estaban más a mano y que eran propias de nuestra cultura y hayamos tenido que ir a buscar una respuesta a miles de kilómetros de distancia, geográfica y cultural. Esto entraña, como es de esperar, grandes dificultades para el individuo que primero, duda de su propia identidad y segundo, tiene que esforzarse por reconstituirse a partir de una cultura que, en principio, le es ajena. 

Si nos damos cuenta el camino o Yoga ha sido interrumpido, viéndonos obligados a tomar una serie de carreiros para poder llegar al mismo sitio. La prueba está en las tres preguntas iniciales, la prueba está en que a todos nos gusta Prana pero a muy pocos el espíritu santo.

Es por esta razón, que ha sido necesario la creación de espacios nuevos que se fundamentan en los principios básicos del bienestar y liberación de los corazones de todos nosotros pero que constituyen sus formas de comunicación en otras culturas.

Uno de mis consejos es que confiemos en los principios básicos del prana y en nuestra intuición para formar parte de aquello que nos hace sentir libres. Que usemos nuestro conocimiento para complementar nuestra experiencia y así podamos constituir una manera de vivir profunda, basada en los fundamentos de todas las culturas clásicas del mundo, aquellas que se basan en los movimientos libres de la naturaleza. Y que una vez hayamos entendido mínimamente qué significa Yoga, nos animemos a preguntar qué hay de yoga en mi, en mi gente, en mi lugar. Entonces hacer del Yoga un camino diario y cotidiano.

Desde hace más de tres años y cada día con más fuerza, me enorgullezco de formar parte de un proyecto que busca la libertad de todas las personas que deciden llamar a sus puertas. Un equipo que se entrega de todo corazón a una misión que le vino dada. Un equipo que ha comprendido que acompañando y sirviendo, tienen la oportunidad de potenciar la función fundamental del prana; circular de forma ordenada y libre para que la naturaleza siga su curso. A todas las personas que cada día hacéis posible que todas cumplamos un propósito de vida, muchas gracias. A todas aquellas que todavía están por llegar, bienvenidas.

Gracias a Miguel y Carlos por las imágenes que me han cedido